La venganza de la guerrera del Norte parte 1

La noche estaba en calma, como siempre solía ocurrir en el bosque del Norte de Burgos. Los lobos habían salido a la caza, los búhos observaban relajados las estrellas y Edurne, de tan solo 10 años, como habituaba, paseaba ella sola por aquel misterioso lugar. Ella no tenía miedo a nada (o eso creía), ni siquiera a la muerte, pues había sobrevivido a lo que, dos años atrás en su casa, había sucedido con su familia...Al salir el sol, Edurne se encontraba en su refugio en la copa de un árbol. No era gran cosa, pero uno se podía conformar con ello.Por la mañana. al despertar, fué a pescar truchas para comer ese día. El río que frecuentaba, se encontraba a unos 2 kilómetros de su cabaña, tenía una preciosa agua cristalina y se respiraba un profundo aire fresco. Al llegar, se refrescó la cara, bebió un poco y observó su reflejo durante un instante. Sus ojos marrones brillaban junto su rizado y encrespado pelo rubio. Empezó a pensar sobre su pasado y lloró.Recordó la muerte de sus padres hacía dos años ...< Unos bandidos muy conocidos por todo el reino habían llegado al pueblo donde ella nació, amenazaron a todos con torturar a los habitantes habitantes que secuestraran por las noches, si no les daban una gran cantidad de las antiguas monedas de oro españolas. Horas después del anochecer, al saber que no les iban a dar lo que pedían, fueron a la primera casa que encontraron. Su casa. Al oír voces, su madre escondió a Edurne y a su hermano Hernán en el sótano mientras que el padre les despistaba, en apenas tres minutos, se escuchó un potente disparo y un terrible grito ahogado. Hernán, salió despavorido al oírlo por una pequeña ventana por la que solo cabía el y escapo. Ya nadie supo nada más de él. Marta, su madre, la protegió con su vida y murió abrazándola. Lo último que dijo fué: 'Nunca olvides quien eres, mi pequeña Edurne... Huye... Sálvate..'Edurne se estremeció de la cabeza a los pies y cuando tuvo ocasión, escapó del pueblo para no volver jamás.>